Historia de una mujer que caminó por la vida con zapatos de diseñador
Todo acto de escritura es un acto de destrucción, y todo escritor se destruye a sí mismo al cortar paño sobre su propio traje en el acto mismo de la autobiografía. Pero ¿se tratará en verdad de una autobiografía? Nora García, la protagonista de esta Historia, es una mujer que experimenta el mundo a través de su cuerpo, es más, se conecta con él desde la punta de los pies, y si éstos van calzados con zapatos de diseñador, el camino por andar se vuelve menos arduo. El lenguaje es, quizá, otra de las vertientes de esta Historia, una exploración de las palabras que se comportan como un cuerpo femenino degradado. El cuerpo de Nora García es un cuerpo azotado, desecado (la narradora ha experimentado desde su cuerpo el mundo entero) al que se puede doblegar, vaciar, aniquilar, dejarlo listo para una cocina del textopalabras desplumadas o destripadas como si fueran aves o bestias. La memoria se convierte en una farsa, «cae» en la farsa, en la de fragmentación del cuerpo y de la de la experiencia que posibilita destruir no sólo la historia de Nora García, sino los signos de una existencia previamente delineada, donde sólo los zapatos conectan con la realidad.